Hace ya algún tiempo, escribía sobre los afortunados estudiantes erasmus. En aquel entonces había pocos en la familia, pero crecen y crecen como las setas.
En estos días se nos van dos más. Una a Bélgica (que tendrá aquel país, con el frío que tienen que hacer) y el otro a Alemania (mira, este también lo repiten).
Así que ahí los tenemos, ampliando horizontes, idiomas y alguna cosas más (supongo). El de Alemania encima llega para la famosa fiesta de la cerveza, eso si que me dá envidia de verdad.
Desde aquí les deseo lo mejor a ambos, y a la otra que siguen en Bélgica de erasmus permanente. Esta vez, me encantaría poder ir a visitarlos (incluso con mi mujer si ella quiere, claro).
PD. Ahora que la cosa esta tan malita en España, el gobierno podría dar becas erasmus a parados o trabajadores estresados ( de 6 meses solo), yo me apuntaba fijo.